miércoles, 19 de noviembre de 2008

Nadie es perfecto

Una de las tareas más difíciles que enfrenta una iglesia es elegir a un buen Pastor. Un miembro de una junta oficial que tenía que cumplir con ese angustiante proceso, finalmente perdió la paciencia. Acabada de presenciar cómo el comité de relaciones pastorales rechazaba solicitante tras solicitante, por alguna falta menor... real o imaginaria. Era el momento de que el mismo comité se hiciera un examen de conciencia. Así que ese hombre se levantó y leyó está carta, dando a entender que era de un solicitante.
Caballeros: Entiendo que su púlpito está vacante y me gustaría solicitar el cargo. Lleno con muchos requisitos. he sido un predicador con mucho éxito y también he tenido algunos triunfos como escritos. Algunos dicen que soy un buen organizador. He sido líder en la mayoría de los lugares donde he estado. Tengo más de 50 años de edad y nunca he predicado en un lugar por más de tres años. En algunos lugares, he dejado el pueblo después de mi trabajo ha ocasionado disturbios y levantamientos. Debo admitir que he estado en la cárcel tres o cuatro veces, pero no a causa de alguna fechoría. Mi salud no es muy buena, aunque todavía hay muchas cosas que puedo llevar a cabo. Las iglesias en las que he predicado han sido pequeñas, aunque han estado ubicadas en varias ciudades grandes. No me he llevado muy bien con los líderes religiosos de los pueblos donde he predicado. En realidad, algunos me han amenazado y hasta me han atacado físicamente. No soy muy bueno para llevar registros. Se me conoce por olvidarme de los que he bautizado. Sin embargo, si pueden utilizarme, prometo hacer mi mejor esfuerzo.
EL miembro de la junta se dirigió al comité diciendo:-Bueno, ¿qué piensan ustedes? ¿Lo llamamos?
¡Las honorables personas de la iglesia estaban pasmadas! ¿Considera a un enfermizo, buscapleitos, distraído, ex presidiario? ¿Estaba loco el miembro de la junta? ¿Quién firmaba sus solicitud? ¿Quién había tenido esa colosal desfachatez?
El miembro de la junta los contempló a todos con agudeza, antes de replicar:-Está firmada por el apóstol Pablo.
1 Pedro 2:9Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, gente santa, pueblo adquirido, para que anunciéis las virtudes de aquel que os ha llamado de las tinieblas á su luz admirable.
Fuente: Sopa de Pollo para el Alma del Cristiano, Editorial HCI
Muchas veces estamos esperando que los pastores sean perfectos cuando en realidad son hombres iguales que nosotros...

jueves, 6 de noviembre de 2008

Por no buscar al Rey

El extranjero

Había una vez, hace mucho tiempo atrás, un hombre que decidió abandonar el reino en el que vivía, no le gustaba, había demasiada maldad, por lo cual tomo sus pocas pertenencias y se fue en busca de un reino mejor.
Este hombre al fin encontró a un reino para quedarse a vivir, pero él era nuevo en este reino, no conocía nada ni a nadie.
Entonces cuando llegó, encontró un pequeño espacio debajo de un puente, como el tamaño de una sola habitación y con algunos restos de madera que encontró por ahí armo un resguardo para poder vivir.
En este reino había mucha gente que vivía muy bien.
Este hombre no tenía dinero para comenzar, ni para comer, por lo cual decidió ubicarse en una plaza central del reino y le pedía a los que pasaban que les diera algo para comer.
Algunas personas que pasaban le decían que hablara con el Rey, y en la medida que podían le dejaban algo para comer, o algo de abrigo.
El extranjero (como lo llamaban los habitantes del Reino) pensaba: “Estas personas se burlan de mi y me dicen que le pida al Rey un trabajo, como podría recibirme el Rey a mi que son un extranjero, pobre, desconocido y darme un trabajo”
Otras personas llamativas que vestían túnicas oscuras con capuchas y nunca mostraban su rostro le decían que no se le ocurriera ir al Rey, porque era muy malo, que no perdiera su tiempo.
Así pasó el tiempo, pidiendo limosna, viviendo como mendigo, alimentándose con los restos, y la gente pasaba y le decía que fuera al rey, pero él no les creía lo que le decían.
Así pasó un tiempo, hasta que un invierno muy fuerte azotó el Reino, con temperaturas bajo cero, y el pobre extranjero falleció. Fue hallado muerto en su pequeña casa de madera. Lo sucedido corrió velozmente hasta llegar a oídos del Rey, el cual Preguntó: “¿Porque cuando este hombre llegó a mi Reino no vino y me pidió, un terreno, una casa y un trabajo para sustentarse? Yo se lo hubiera dado.” Y las personas que conocían al extranjero le dijeron al Rey: “Nosotros se lo dijimos, pero él no quiso creer.” Y el Rey se lamento mucho por este hombre.

Así lamentablemente, sucede con muchos que no buscan al Rey de Reyes, a Jesucristo, el único que puede darnos una solución para no morir espiritualmente. Y Jesús se lamenta mucho, ya que el nos dió libre albedrío para decidir buscarlo o no.
Y ojo!! dije a Jesucristo, no a una religión, ni denominación, ni edificio, ni a una persona.

Que nadie robe tus sueños

Ante un grupo de niños un hombre narro la siguiente historia: Habia una vez un muchacho quien era hijo de un entrenador de caballos. El padre del muchacho era pobre y contaba con apenas unos pocos recursos para mantener a su familia y mandar al muchacho a la escuela. Una mañana en la escuela, estando el muchacho en la clase, el profesor le pidio a los alumnos que escribieran la meta que quisieran alcanzar para cuando fueran adultos.El joven escribio una composicion de siete paginas esa noche en la que describia su meta. Escribio su sueño con mucho detalle y hasta dibujo un plano de todo el proyecto:el rancho, la ganaderia, el terreno y la casa en la que queria vivir; en fin, puso todo su corazon en el proyecto y al dia siguiente lo entrego al profesor.Dos dias mas tarde, recibio de vuelta su trabajo reprobado, y con una nota que decia:"venga a verme despues de clases". El chico del sueño fue a ver a su profesor y le pregunto por que me suspendio? El profesor le dijo:"es un sueño poco realista para un chico como tu. No tienes recursos; vienes de una familia pobre. Para tener lo que quieres hacen falta muchas cosas y ademas mucho dinero. Tienes que comprar el terreno, pagar por la cria original y despues tendras muchos gastos de mantenimiento. No podrias hacerlo de ninguna manera. A continuacion el profesor agrego: si vuelves a hacer el trabajo con objetivos mas realistas, reconsiderare tu nota".El chico volvio a su casa y penso mucho. Tambien le pregunto a su padre que debia hacer. Este le respondio:" mira hijo, tienes que decidir por ti mismo; de todos modos, creo que es una decision importante para ti, cierto?"Finalmente despues de reflexionar durante una semana, el chico entrego el mismo trabajo, sin hacer cambio alguno. Le dijo al profesor:"usted puede quedarse con mi mala nota, yo me quedare con mi sueño".Al concluir el hombre miro a los niños y les dijo:"Les cuento esta historia porque es mi historia. Aqui estamos en medio de la casa de mis sueños, dentro del rancho que me propuse conseguir por que esa era la meta de mi vida. Aun conservo aquella tarea del colegio enmarcada sobre la chimenea". Luego agrego: "lo mejor de la historia es que hace dos años, ese mismo profesor trajo a treinta chicos a visitar mi rancho". Y al irse el profesor me dijo: "mira, ahora puedo decirtelo. Cuando era tu profesor, era una especie de ladron de sueños. Durante esos años, le robe un monton de sueños a los niños. Por suerte tuviste la suficiente fortaleza para no abandonar el tuyo'.""No dejemos que nadie nos robe nuestros sueños, ni tampoco le robemos a otros los suyos"